jueves, 26 de julio de 2012

¡Preciosa Laguna del 69!

Pasados unos días en Huaraz de obligado descanso la cosa ya pinta bien. Dejamos el arroz blanco y la zanahoria y retomamos el festival gastronómico. Unos zumitos por aquí, unos picoteos por allá y un poquito de carne para coger fuerzas y volver a estar a tope de power. Es la despedida de Ánder y lo celebramos con una timba de mus Unai y yo contra Ánder y Olatz. Al final empate 3-0 y 0-3 de fruta madre! En la cenica nos deleitamos con unos tequeños de espinaca y queso, unas ensaladicas y unos buenos pollos. Poco a poco la gente va volviendo a sus casas y llegan aquí caras nuevas. Somos los eslabones de una cadena que no para de crecer pero que no se rompe. Sumamos contactos de casa y de fuera y acumulamos experiencias vitales que trascenderán o quedrán para un bonito recuerdo. Lo que está claro es que lo que nos está dando este viaje es mucho más de lo que podíamos esperar y con una mezcolanza de pena y alegría vemos como los días pasan volando y cada vez está más cerca la fecha de vuelta...
Uno de los tantísimos caprichos que nos damos es ir en cuadrilla a las piscinas de barro de Monterrey. Se supone que esas aguas naranjas y templadas son buenas para la circulación, el reuma, la artrósis y no se cuantas cosas más. El caso es que Irati, Dabitxo, Iker, Olatz, Unai, Dabid, Katty, Isa, Jose, Patri y yo disfrutamos de un buen momento de descanso antes de volver a las montañas...
De Huaraz volvemos a coger un colectivo hacia Yungay y la laguna de Llanganuco. Conocemos el sitio de cuando Patri y yo estuvimos por el Chopicalqui y nos gusta volver a pasar por unos paisajes de órdago. Al llegar a la curva del Pisco bajamos a Cebollapampa y cogemos un arriero y tres mulas para que nos suban el peso a Dabid, Patxi, Iker y a mi. Patri y Javi van con mochila ligera y para el día pero nosotros además tenemos alguna que otra ilusión...
Al llegar a la laguna del 69 alucinamos con las vistas de la laguna y del entorno. Los Chacrarajus, los Piscos, los Huandoy, los Huascarán, el Chopicalqui y el Yanupacha nos rodean y disfrutamos del espectáculo. Es el último día en el que estamos Patri y yo y nos dan penica separarnos aunque sólo sean cuatro días. Una se va a la selva con una compañía que le va a llevar a cazar pirañas, ver caimanes y conocer  una tribu indígena y el otro se queda por aquí a ver si se hace con alguna montaña. La verdad es que estos día por Perú con ella han sido geniales y no los cambiaría por nada del mundo. Unas vacaciones geniales que nos han hecho vivir y compartir un montón de historias preciosas...
Un saludico y hasta la vista alpinistas...

5 comentarios:

Rosa dijo...

Bueno,bueno, bueno........,vaya bacanal en la laguna 69.............jajajajaajajaja . Guapos en esta ultima foto, preciosas montañas, que envidia. ¿Que tal en la selva Patri?, ¿Vistes todos eso bichos?. Terminad muy bien y disfrutando de estos dos últimos días. Besos fuerte a los dos. Mam

Juan korkuerika dijo...

Un besico para ti también!!!
Hasta la vista alpinistaaaa

Unknown dijo...

Ehhh Juan ... que bueno es ver tanta alegria y felicidad con Uds. me da muchisimo gusto que la pasen tan bien!! .. Todas las fotos estan muy guapas !!
Que lastima que no hayan podido hacer el Ocsahpalca ... pues queda para el proximo año tio , un pretexto más para que vuelvan ...
Un abrazo !!

Juan korkuerika dijo...

Katty no dudes que en cuanto podamos volvemos aquí que nos habeis tratado superbien jjjjj
Un besico y hasta la vista alpinistaaaa

Ana dijo...

Desde ya que se nota que las lagunas esas de barro son buenas para la circulación, la artitritis y muchas cosas más, se nota ya desde la foto que el agua conserva algunos minerales naturales que le hacen muy bien a los huesos, la piel y las arterias. Yo hace poco empecé con una contractura en la espalda y no sabía que hacer. Me recomendaron ir a la laguna de Lobos que decían que también tenía propiedades curativas, y en este caso se sumaba la ayuda con los nudos que uno pudiera tener por estrés. Me hizo bárbaro: hasta ahora no volví a sentir dolor!