Una tarde por Vadiello ¡Por fin entrenando en el dead wall!

Este año por unas cosas o por otras todavía no había salido a escalar ninguna tarde. Ni a Morata, ni a Vadiello ni a ningún sitio. Esta semana estaba Patri por Zaragoza y los astros se alineaban para poder trepar un poco. Echaba de menos eso de escalar recién salido del curro, todavía haciendo la digestión, con el calor de las primeras horas de la tarde y disfrutando de la sucesiva bajada de temperatura conforme se va acercando el crepúsculo. Rasmia, Bull, Alex, Iñaki, Jorge Galve, Diego, Mirta, Patri y yo no paramos en toda una tarde en la que tan sólo hubo tres cordadas más en un dead wall que ardía y que daba espectáculos de vuelo por todas partes...