Hace tiempo que me rondaba esta idea por la cabeza y varios intentos frustrados no hacían más que aumentar la atracción que esta actividad tenía sobre mi. Parecía que nunca iba a llegar pero en el momento más inesperado se ha puesto a tiro y junto a Pablo Ariza encadenamos la cresta de Alba y la Sur de la Maladeta en Non-Stop.
En Alpes el tiempo es más bien inestable y después de escalar el Gervasutti se metió marrón en Torino y acabamos el Stage un día antes. Despedidas, besos, abrazos y vuelta a casa al ritmo de Marilyn Manson. Unas llamadas de teléfono nos anticipan buen tiempo en Benasque así que de cabeza al jaleo. Después de dormir cinco horas escasas nos levantamos y unas cuantas horas después caíamos, de nuevo, muertos en nuestros sacos en los Baños de Benasque.
En definitiva una experiencia difícil de olvidar por la actividad y por la compañía.
¡Un saludico y hasta la vista alpinistas!